Colombia es un país que cuenta con la dicha de ser multicultural, cosa que no todos pueden decir, pero si hay algo que hace aun mejor a nuestro territorio es la variedad de comida. M uchos de los turistas vienen con ansias de probar nuestros platos, descubrir nuevos sabores y sazones. El problema que encuentro es que nosotros mismos no valoramos nuestra variedad de alimentos. el colombiano de por si, está en una lucha por cual es la región que más trabaja, la de mejor linaje, la más bonita, cualquier cosa que genere debate entre uno mismo. L a comida no se queda atrás, aun sabiendo lo importante que es para nuestro día a día, nos damos el lujo de despreciarla porque no es de nuestro agrado. Abelardo de la Espriella, uno de los abogados más famosos que tenemos, en una entrevista criticó platos como al ajiaco sin conocer el contexto, el cual es necesario saber ya que el campesino necesitaba mucha energía para continuar sus tareas diarias, por eso se cargaba de carb...
Día a día siempre vemos personas que viven en la calle, sin tener nada, pidiendo una limosna para sobrevivir con una pena interior que seguramente ellos quisieran evitar decir esas palabras. No sabemos cuán solos se sienten, la razón de porqué llegaron a esos estados extremos de soledad. Darles una moneda no nos hará pobres. El objetivo de este ensayo es demostrar cómo la soledad puede ser también un sentimiento que puede hacer parte de nuestra genética, ese que todos creen que solamente es por experiencias vividas y malos momentos es que se puede sentir, pero nunca tenemos en cuenta que muchas veces la causa de este sentir es porque ya viene dentro de nosotros. Este sentir altera la forma de vivir, la forma de pensar y de actuar de las personas; como se muestra en el libro “La muerte en la calle” de José Félix Fuenmayor. Teniendo como referencia el título “La muerte en la calle” al uno leerlo, ya sabe que va a hablar de alguien que murió en la calle....